09 Ene Un espacio limpio y sencillo que relaja
Un hogar de estilo escandinavo se caracteriza por usar pocos muebles, tener mucha iluminación y pocos colores. Espacios así inspiran, relajan y renuevan.
El color protagónico es el blanco acompañado de tonos claros que logran dar gran iluminación a los espacios, aunque los toques de color en muros siempre hacen los espacios más acogedores. Los detalles en colores brillantes sobresalen del resto logrando el equilibrio perfecto.
Los materiales que se usan así como las texturas vienen de la naturaleza como son la madera, lino y algodón.
La simpleza de las texturas permite que se puedan dar acentos con cuadros, rayas, estampados, patrones, texturas contrastantes.
Los cuadros grandes son característicos del estilo escandinavo ya que dan un gran peso de color a las habitaciones.
Las plantas y los muebles de madera dan mucha vida a los espacios donde predomina el blanco.
Las habitaciones son limpias sin saturación de muebles o colores, solo algunas plantas, accesorios cuadros y cojines son los que logran el equilibrio perfecto.
Fotos: Pinterest
