
23 Feb Un pequeño departamento de altura
La región Escandinava es reconocida por su buen diseño tanto de objetos como de espacios.
Con un sello muy particular, el estilo Nórdico plasma en su esencia maderas claras, metales negros y pocos muebles de líneas simples.
Es común encontrar espacios de pocos metros cuadrados en esta región del Norte de Europa, como es este departamento caracterizado por tener pocos elementos logrando mantener la independencia y privacidad de cada área.
Un muro de vidrio es la principal característica y el único elemento que divide los espacios de este departamento. El muro da privacidad a la recámara, pero al ser de vidrio permite ver la profundidad tanto del interior de la habitación como del resto de la vivienda, lo que le da mucha amplitud e iluminación a todo el sitio.
La habitación es muy sencilla, cuenta solo con lo necesario. La paleta de color es monocromática predominando el blanco y negro, con ciertos toques de gris. Un diseño asimétrico tanto por los elementos decorativos, como por la inclinación del techo hace que la recámara sea un espacio muy acogedor.
Al ser una racámara de pocos metros el closet tiene muy poca presencia gracias a su diseño simple, material y color blanco que lo hace pasar como un muro más.
A pesar de las dimensiones del departamento, éste logra crear diferentes ambientes. Un rincón acogedor es la sala, con el techo inclinado y una sutil ventana creando el entorno perfecto.
La sala se integra a la cocina en color gris, los muebles sencillos le dan protagonismo al mármol.
Frente a la cocina esta una pequeña terraza con una gran vista a los techos de otras construcciones, dando una sensación de estar frente a bodegas o fábricas.
La cocina es el espacio que une todas las áreas y es lo que da amplitud al departamento por ser abierta y estar al centro. Con un pequeño comedor contemporáneo se logran tener todos las piezas de la casa con un perfecto equilibrio y diseño.
Fotos: Gravity Home