
16 Sep Vintage lleno de color
Algo nuevo, algo viejo, algo prestado, algo azul… así, con cosas encontradas aquí y allá, heredadas de parientes o traídas de viajes lejanos es que esta pequeña casa en Brooklyn, Nueva York, ha ido tomando forma.
Pensada para una familia de 4 integrantes, con dos niños pequeños en constante movimiento, el diseño de interiores mezcla colores sólidos como el amarillo, rojo y verde con patrones llamativos y cientos de elementos decorativos que le dan un aire vintage muy fresco.
Un papel tapiz atrevido puede cambiar por completo el ambiente de una habitación. En este caso, los dibujos de hojas verdes contrastan con el amarillo de la cajonera y el rojo de la silla para crear impacto visual.
Aunque los espacios podrían parecen recargados debido a la cantidad de objetos y elementos decorativos, hay una cierta ligereza que se consigue con una paleta de color intensa y divertida.
El muro-galería de la sala es una gran forma de exhibir los tesoros personales, cuadros antiguos, objetos heredados, libros y souvenirs. Nada de minimalismo… la clave para una decoración vintage y alegre está en mantener una paleta de color clara y, desde ahí, atreverse a mezclar texturas, formas y estilos ¿se animan?
Fotos: David Land